jueves, 2 de septiembre de 2010

Utagawa Hiroshige

Utagawa Hiroshige (1797-1858)

Nació en Edo, actual Tokio, en 1797, y murió en la misma ciudad el 12 de octubre de 1858. Excelente grabador y xilógrafo, fue uno de los mejores representantes de la escuela de pinturas del mundo flotante, Ukiyo-e. Su genio para las composiciones de paisajes fue reconocido por los pintores occidentales y muy admirado por los impresionistas y postimpresionistas.

Era hijo de Ando Genemon, guarda de la brigada de fuego de Edo, es decir un samurai encargado de la prevención de incendios, que era uno de los vasallajes hereditarios del shogun Tokugawa. Es conocida su afición al dibujo desde muy niño. En la primavera de 1809, cuando Hiroshige contaba doce años de edad, murió su madre, poco después su padre renunció a su puesto como guarda y se lo traspasó a su hijo; murió al año siguiente.

(Awa Province)

Las obligaciones diarias de Hiroshige como guarda de la brigada de fuego eran mínimas, pero su salario también era pequeño; estos factores, más su natural predisposición al dibujo, hicieron que en 1811 entrará a formar parte de la escuela de Ukiyo-e con el maestro Utagawa Toyohiro. En 1812 tomó el nombre de su maestro (símbolo de graduación) y firmó sus obras con el nombre de Utagawa Hiroshige. Se convirtió en uno de los discípulos preferidos del maestro, y fue sin duda el gusto refinado del maestro lo que fue modelando el propio estilo de Hiroshige que, guiado a su vez por su propio genio, se convirtió en el mejor xilógrafo de paisajes.

Aunque recibió el nombre de artista y la licencia de la escuela de forma temprana, a la edad de quince años, Hiroshige no era ningún niño prodigio, y realmente no presentó de forma pública su trabajo artístico hasta tres años después, en 1818. En el campo de la ilustración del libro creó una marca propia, Ichiyusai Hiroshige. Durante su periodo de estudiante realizó algunos trabajos para el estudio de Toyohiro y también se dedicó al conocimiento del arte chino, la influencia del estilo Kano y del estilo impresionista Shijo, que influyeron grandemente en su estilo posterior.


Tan pronto como le fue posible, Hiroshige traspasó su puesto de guarda del fuego a su hijo y él se dedicó plenamente a su arte. Como suele ocurrir con la mayor parte de los artistas de clase baja de la escuela Ukiyo-e, apenas se conocen más datos biográficos, ya que la sociedad japonesa del momento consideraba a estas personas exclusivamente en su faceta artística, y aunque sus trabajos fueron muy solicitados e incluso fueron atesorados, prácticamente nada interesó de los detalles personales en la carrera de estos artistas. Así, lo que se conoce del Hiroshige adulto se debe rastrear a través de sus trabajos.

La vida artística de Hiroshige se puede dividir en tres etapas. La primera, su largo periodo de estudiante, desde 1811 hasta 1830, durante el cual imitó el trabajo de los grandes maestros realizando fundamentalmente impresiones de figuras, muchachas, agentes, samurais o guerreros.







El segundo es su primer periodo de paisaje, que se desarrolló desde 1830 y hasta 1844, momento en el que elaboró su propio ideal romántico del paisaje. Sus pinturas de pájaros y flores se logran totalmente en su obra más conocida Cincuenta y tres escenas de Tokaido (Tokaido gojusan-tsugi) y otras series de impresiones que representaban vistas del paisaje de Japón.













Su siguiente etapa, desarrollada entre 1844 y 1858, se caracteriza por las impresiones de paisajes en los que se va introduciendo la figura humana; es una etapa en la que Hiroshige se convirtió en un artista sumamente popular pero el exceso de producción de obras rebaja la calidad de las mismas.










En 1856 tomó los hábitos religiosos como sacerdote budista. Murió de cólera el 12 de octubre de 1858 en Edo.

Convirtió los paisajes cotidianos en escenas líricas de gran intimismo que le proporcionaron un éxito comercial aún mayor que el de su contemporáneo Hokusai. Junto a él, dominó el arte popular japonés durante la primera mitad del siglo XIX. Su obra no fue tan innovadora como la del primero, pero supo captar de un modo sutil, poético y de fácil comprensión la experiencia que la gente corriente tenía del paisaje japonés, así como las diversas características de los lugares memorables según los diferentes momentos del día. La nieve, la lluvia, la niebla y las escenas de claro de luna componen algunas de sus obras maestras más poéticas.

Aunque Hiroshige se había mostrado muy temprano como una promesa artística, no fue hasta 1832 cuando se desarrolló plenamente su talento. Ese año realizó un viaje entre Edo y Kyoto, a lo largo del camino de Tokaido, en el que realizó dibujos y borradores de las cincuenta y tres etapas de su viaje. De este material ese mismo año publicó cincuenta y cinco xilografías tituladas Cincuenta y tres escenas de Tokaido. El éxito de esta serie fue inmediato y Hiroshige se convirtió en uno de los artistas más populares de la escuela Ukiyo-e.

Posteriormente realizó otros viajes por el Japón de los cuales salieron series de grabados como Sesenta y nueve escenas en la carretera de Kiso, Vistas de Edo, Ocho vistas del lago Biwa o Lugares famosos de Kyoto. Además, en varias ocasiones realizó nuevos diseños de la serie Cincuenta y tres escenas de Tokaido con los dibujos que habían quedado inéditos.
La calidad de su trabajo disminuyó al final de su vida, en gran parte debido a las demandas de su editor y también a su propia necesidad de dinero.

Se ha estimado que Hiroshige llegó a estampar más de 5.000 impresiones y que alrededor de 10.000 copias salían de algunos de sus bloques de madera.




(Retrato póstumo a la memoria de Hiroshige pintado por el pintor y amigo Utagawa Kunisada (1786 -1864).)

2 comentarios:

  1. Me encantó esta entrada. Gracias por tan completo y hermoso trabajo.

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  2. crtezi su neverovatni, sa kakvom lakocom su napravljeni, da pokazuju karakter svakog lika na njemu. jednom recju fantasticno, a to su radovi iz 17, 18 veka, nemam recu koliko su dobri.

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